Cuando hablamos de un juego en nuestro Blog, es muy probable que muchos no hayan oído hablar de él, pero con éste no creemos que sea el caso. Desde que nació hace menos de dos años, Clash Royale se ha convertido en el rey de los juegos móviles. Más de 100 millones de descargas avalan este éxito, y ni siquiera el fenómeno de Pokemon Go ha podido superarle. Un dominio rotundo que se acentúa entre los menores y por lo que vamos a intentar analizar en qué consiste este juego y si es apropiado para nuestros pequeños.
Según nuestros datos, casi 1 de cada 3 menores juega a Clash Royale
Clash Royale es un juego de batallas multijugador en el que se lucha con los personajes del mundo de otro juego muy popular: Clash of Clans. Esto es, sobre un campo de batalla como el que aparece en la imagen dos jugadores van enviando a sus personajes a vencer a los del rival y derribar sus torres para conseguir ganar. El juego termina cuando uno de los dos consigue derribar las tres torres del rival, o cuando pasado un tiempo ninguno lo ha conseguido, en cuyo caso vencerá el que más torres haya derribado.
Si tenemos en cuenta que éste es un juego de lucha en el que hay personajes como bárbaros, brujas o dragones, uno podría pensar que no es el juego al que deberían jugar nuestros hijos. Pero se equivocaría. Aunque eso es cierto, Clash Royale utiliza estos elementos de una forma muy amistosa, con personajes que más que miedo inspiran ternura y una animación muy entretenida y agradable. En sus batallas no hay ni rastro de insultos, violencia explícita o sangre. Y la única agresividad que se podrá percibir en sus partidas es la que tenga el jugador por haber perdido.
Más allá de eso, Clash Royale es, por encima de todo, un juego de estrategia y matemática. Un desafío para cualquiera que lo juegue, sin importar la edad. Y por eso, usarlo de forma moderada puede ser un gran aliado para la educación de nuestros pequeños.
La clave para vencer en este juego está en conocer bien la fuerza y la defensa de cada uno de los diferentes personajes, que son cifras numéricas, así como utilizarlos de forma estratégica. De este modo, los mejores jugadores utilizan las matemáticas para saber en todo momento si el personaje que van a usar puede vencer al de su rival. Así, si su rival utiliza una arquera con 200 de ataque y 100 de vida, él sabe que puede ganarle con el guerrero de 150 de ataque y 250 de vida. Aunque en el juego no es tan sencillo: velocidad de ataque, número de tropas, rapidez de movimiento, etc.
Las matemáticas y la lógica son fundamentales para ganar en este juego
Pero no sólo la destreza matemática es importante para ser un buen jugador de Clash Royale, sino que también desarrolla las habilidades relacionadas con la lógica. Aprender los momentos en los que utilizar cada personaje, conocer las combinaciones ganadoras, desarrollar diferentes estrategias. Una serie de retos y problemas que resolver enmarcados en un contexto que les gusta, y que por tanto reciben con buenos ojos.
Justo por eso, nuestra recomendación es que Clash Royale puede ser una buena herramienta para el desarrollo de nuestros hijos. Siempre utilizado con moderación, su capacidad para mejorar estas habilidades en un entorno apetecible para ellos es una buena forma de aprender. Además, lo van a utilizar por voluntad propia. De hecho, algunos colegios han aprovechado este juego para crear iniciativas didácticas muy interesantes, como Math Royale. Porque en muchos casos la educación no depende tanto del interés en el contenido, sino del modo en el que lo van a aprender. Y un juego como éste tiene muchas ventajas que aportar.
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